A partir de aquí empieza a cambiar la cosa, es decir, empieza la maratón de verdad.

Del km 25 al 30 la carrera circula paralela al Sena. Una zona de túneles, con continuos sube y bajas, y un túnel de algo más de 1 Km. El dichoso tunel no se me hace demasiado largo, ya q la gente se pone a chillar y anima un poco la cosa, pero las subiditas en las salidas de los túneles ya me resultan duras. Al fin y al cabo ya levo muchos kilómetros en las piernas, y voy bien de tiempo, así q me puedo permitir bajar algo el ritmo. En el dichoso túnel largo un viejo me pega una patada q me hace tropezar, y lo q es peor me da un pequeño, minúsculo conato de tirón en la pierna izquierda. Suficiente aviso para tener otra excusa para bajar otro poco el ritmo. Con todo esto llego al Km 30 con un tiempo de 2H34’31’’. El objetivo de las 4 Horas sigue sin peligrar, y el de las 3H50’ sigue siendo más q factible. En el 31 tiene q estar Rakel y estoy al par de la torre Eiffel.

Intento disfrutar del recorrido, pero aquí ya es muy difícil. El avituallamiento q está antes del 31 me lo tomo con más tranquilidad (si eso es posible) q los anteriores. Llego al 31 y no veo a Rakel. Me tenía q dar un gel q me habría venido de perlas (como excusa para frenar otra vez claro). Bueno, pues no está. Empiezo ya la táctica de pensar solo en el siguiente avituallamiento, y no preocuparme ya del tiempo. Hace ya varios kilómetros q se fueron las liebres de 3H30, pero las de 3H45 todavía no me han pasado. ¡SOY UNA MAQUINA, SOY UNA MAQUINA!, al ralentí, pero máquina al fin y al cabo. Del 30 al 35 el perfil vuelve a picar algo para arriba, no mucho pero teniendo en cuenta ya el cansancio, demasiado. Además se sale de Paris, por lo q vamos por unos barrios q no tienen demasiado interés. Estos kilómetros los hago ente 6’ y 6’30, y sufriendo más de la cuenta. En este caso el problema está siendo muscular, ya q físicamente aguanto bien, pero se ve q el ritmo q he llevado desde el principio me ha cascado mucho las piernas.
En el Km 35 bajón total, tengo q parar a andar, pero con tan buena suerte, q echo a andar justo en una curva, y después de ella venía el siguiente avituallamiento, con lo q me puedo engañar a mi mismo diciendo q no he parado, solo me he “avituallado” (jeje, cualquier táctica sirve para "arrastrarse un rato más"). Paso el Km 35 en 3H7’35’’. Solo me quedan 7 Km y 53 minutos de tiempo para bajar de las 4H. ¡SOY UNA maquina!. Vuelvo a echar a correr, y consigo aguantar hasta el 37. Son los dos Km más duros en cuanto a perfil, y acaban pos destrozarme las piernas. Los hago en 7’32’’ y 7’14’’ respectivamente. A estas alturas, y este ritmo, el objetivo de las 4 H corre serio peligro. Si corro llego, pero si ando no, y no puedo correr. Y a partir de ahí este dichoso blog empieza a ayudar. Llevo ya la calculadora echando humo, y veo q si mantengo a 7’Km (o sea, corriendo) llego, pero si hecho a andar voy a 8-9’Km no llego. Y pienso q llegado a este punto, ya el hecho de andar o correr solo es cuestión de güevos, y q si ponía en el blog un tiempo de 4H2’ ó 4H3’ me ibais a poner de maricón para arriba, por lo q nuevamente a correr. Corro todo lo q queda de Km pero vuelvo a parar en el cartelón del 38 con un parcial de 7’21. Todavía llego. Nuevamente a correr, pero ya no aguanto el kilómetro entero. De hecho llego al 39 andando. Este Km en 7’43’’, el más lento de toda la maratón. A este ritmo no llego en 4H. Siguiente kilómetro con otras tres paradas a andar y un tiempo de 7’35’’. Así no llego, tengo q sacar fuerzas de donde sea. Cuando llegas a este punto, lo único q te hace correr es tener una motivación especial, ese poco más q te empuje para no "desparramarte" del todo. Hay vuelve a entrar el blog (entre otas cosas, claro). Paso el Km 40 en un tiempo de 3H44’29’’. Tengo 15’ para hacer 2 Km y 195m, y si son como los dos anteriores me voy a quedar en el tiempo del maricón. Ya es bastante deprimente tener q echar a andar como para encima quedarme a 2 minutos de las 4 Horas.
El toque psicológico de llegar al Km 40 se supone q da fuerzas ya para acabar la maratón, pero parece ser q no. Del 40 al 41 nuevamente andando en un tiempo de 7’23’’. Por cierto, estos últimos Km son por el bosque de Bolonia (algo así creo q se escribe), pero no estaba como para mirar el paisaje. Tengo 8 minutos para 1Km 195m. Definitivamente ya soy un maricón, porque la calculadora me dice q no entro. Ese último Km hay q hacerlo corriendo como sea, pero no lo consigo. Echo a andar hasta en 5 ocasiones, trozos muy cortos de solo de unos metros, pero no consigo correr continuo. En esos momentos ¡¡¡Entramos en Paris!!!, JODER, pero no iba por Paris????. Pues no, me había salido y ya ni me acordaba (como para pensar en chorradas ahora. Eso sería desperdiciar fuerzas). Gracias a Dios, a partir del 41,5 empieza a haber mucha gente, y sus ánimos me ayudan a no parar. Llego al 42 en 3H58’43’’. Tengo 1’17'' para hacer 195 metros. Eso me obliga a correr a 5’ Km. Pero son 200 putos metros, con el arco del triunfo al fondo, picando hacia abajo, y con un montón de gente animando, así q a por ellos. Acelero todo lo q puedo, y me pega un tirón en la pierna derecha (el músculo q está detrás del cuádriceps, q ahora no se como se llama), no puedo parar, pase lo q pase, por lo q sigo corriendo. Y me pega otro tirón en la misma pierna, esta vez en el gemelo. ¿Dónde está el hijo P..a del francotirador q no quiere q baje de las 4 horas?.

Sin poder estirar la pierna sigo corriendo. ¡Total, tengo otra pierna¡, y me pega otro tirón más, para animar la cosa, en la pierna izquierda, en el músculo ese de atrás. Y yo q no encuentro al cabrón del francotirador para poder esquivarlo. Pero gracias a Dios 200 M no dan para más, y entro con un “inmenso” margen de 18 segundos en meta. Y ¡OH SORPRESA!, hay otra raya más q hay q pasar, coño, me quedan 3 metros ¡!!!TODAVÍA¡¡¡¡. En un sublime esfuerzo digno solo de los más audaces atravieso esos metros q me separan de la gloria, y ya puedo quedarme quieto como una tabla. Las piernas para entonces ya habían dicho q no seguían. Recupero algo el aire pero no puedo andar, me tienen q ayudar para no caerme. Las piernas no responden. Me siento en uno de los banquitos q tienen puesto para cortar las bridas de los chips, y descanso ahí unos instantes.
Como conclusión a esta pequeña crónica, me ha quedado un sabor bastante agridulce de esta maratón. Mi mejor tiempo, y Sub 4H (de milagro), pero el tener q echar a andar te deja con la sensación de no haber hecho tu trabajo bien. Tengo q entrenar más y mejor, o sino, simplemente dejarme llevar, ya q los últimos kilómetros sino son imposibles. Y como puse en el blog de Alberto después de Segovia, aprender de los errores, ya q si el hombre es el único animal q tropieza dos veces en la misma piedar, yo ya he tropezado tres veces.
Cita (No se de quien):"El muro no existe, existe la falta de entrenamiento".
Os pongo la gráfica como ejemplo de una maratón mal corrida, o por lo menos ejemplo de un buen hundimiento en la parte final.

Y aquí los húltimos 7 Km amplificados, donde se ve muy bien las zonas donde me pongo a andar.